Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por unas cachemas fritas con arrocito blanco, salsa criolla y un refresco de maracuyá.
“María, falta muy poco para el inicio de las clases escolares, y la ocasión amerita para hacer recordar otra vez a los padres sobre los cuidados que deben tener con sus hijos. Lo digo porque la Policía acaba de capturar a un profesor de matemáticas, en su casa de La Victoria, con gran cantidad de videos de pornografía infantil.
La policía informó que en la computadora de este sujeto había más de 38 mil archivos con material de sexo explícito, donde aparecen menores peruanos y extranjeros. Afirman que este material lo compartía con otros pedófilos integrantes de una red. El tipo enseñaba a niños de primaria en un colegio particular de Jesús María, donde los padres de familia lo consideraban un ‘profesional ejemplar’.
Los detectives han dicho que, como si fuera poco, el sujeto grabó a los menores, a quienes daba clases particulares, haciéndoles tocamientos indebidos. Estas son acusaciones gravísimas que merecen el más duro castigo si llegan a probarse. Situaciones como esta deben ponernos a los padres más alertas que nunca. La industria pornográfica es un negocio multimillonario en todo el mundo, y hay muchísimos monstruos que solo encuentran placer en el ultraje a niños.
Esos depravados existen por miles y están dispuestos a todo para satisfacer sus deseos. Gastan mucho dinero y hasta se arriesgan a terminar en la cárcel, pues sus enfermizos deseos son más fuertes que ellos. Estos sujetos siempre serán un peligro para cualquier menor, pues mientras estén dispuestos a pagar, siempre habrá delincuentes que abusen de ellos.
Los padres no podemos cometer el error de creer que nuestros pequeños están a salvo solo si no los dejamos salir a la calle. Aún en casa, gracias a la Internet, corren serio riesgo. Por eso, los chicos jamás deben tener una computadora en un lugar privado como su habitación. Deben estar en áreas comunes como la sala o un pasillo, a la vista de todos. También hay que conocer los contactos que tienen, pues cualquier depravado podría usar una identidad falsa para llegar a ellos.
El consejo es que solo tengan en sus contactos a personas que conozcan personalmente, como amigos del barrio, compañeros del colegio. Nada de conocer personas mediante la red. Además, ahora que muchos niños tienen teléfonos celulares, con los que pueden tomar fotos y colgarlas en la web, hay que hablar más que nunca con ellos e informarles de los peligros que hay. No les vaya a ocurrir lo que está viviendo Karen Schwarz, quien denunció que extorsionadores le están pidiendo dinero para no hacer público un video íntimo con su enamorado Ezio.
Hay que hacerse amigo de los hijos, ganarse su confianza, para que nos cuenten sus dudas, temores, deseos y esperanzas. Solo así podremos guiarlos”. Gary tiene razón.
Me voy, cuídense.