En noviembre del 2015, el dirigente vecinal chalaco Richar Orlando Agurto Zelaya (44), ‘Lisura’, sobrevivió de milagro a un atentado contra su vida. Esta vez, los sicarios no fallaron y lo asesinaron de 30 balazos en presencia de sus familiares, en el frontis de una iglesia evangélica, en el Callao. Horas después, la policía arrestó a un sospechoso.

Las amenazas de muerte contra ‘Lisura’ se concretaron la noche del martes. Un delincuente bajó del asiento del copiloto de un auto oscuro, en la cuadra 3 del jirón Zepita, sacó una pistola automática y acribilló al presidente de una asociación que luchaba por la pacificación del Callao.

La víctima falleció en el trayecto al hospital ‘Daniel A. Carrión’. Momentos antes, un desconocido en moto pasó por la zona.

Familiares del difunto acusaron a Luis Donaire Flores, ‘Pato ciego’, quien está preso (en ‘Sarita Colonia’) y es acusado de múltiples asesinatos, de haber ordenado eliminar al dirigente vecinal.

“‘Pato ciego’ ha mandado a Giomar y su gente de la calle Venezuela para matar a mi hermano”, denunció Giovana.

Para la policía del primer puerto, esta sería una de las hipótesis sobre el asesinato de ‘Lisura’.

“Richar Agurto tenía que testificar en los próximos días contra ‘Pato ciego’”, indicó el general PNP Cluber Aliaga, jefe de la Dirección Policial Callao.

CENANDO

Tras las acusaciones de los deudos se realizó un operativo policial en busca del sospechoso ‘Giomar’. Ciento cincuenta efectivos rodearon las calles Miró Quesada y Venezuela, y en una de las quintas, detectives de Inteligencia intervinieron a Giomar Alva Quispe (22), ‘Giomar’, mientras cenaba con sus familiares, quienes gritaron y trataron de impedir la captura. En su cuarto, los agentes hallaron municiones de arma de fuego.

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