Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por unos tallarines rojos con pollo, quesito rallado y un refresco de maracuyá.
“María, el verano es la estación más alegre del año porque significa playa, arena, mar, chicas lindas y vacaciones. Pero desde hace años, los rayos solares también son motivo de gran preocupación: tienen los dañinos rayos ultravioleta que no solo provocan ardor, manchas, envejecimiento prematuro de la piel, cataratas y otras lesiones en los ojos, sino también el mortal cáncer. Este problema ha ido aumentando con los años, debido al agujero en la capa de ozono sobre la región antártica, que es la protección que la atmósfera nos da de manera natural.
Según investigaciones, en Estados Unidos, el problema es tan grave que se calcula que uno de cada cinco personas contrae cáncer de piel en algún momento de su vida. Se cree que el melanoma, que es el tipo más grave de cáncer de piel, que muchos padecen en la edad adulta, podría estar relacionado con las quemaduras de piel sufridas en la niñez.
En resumen, salir a la calle en verano sin protección solar, no hablemos de la playa, es como que un bombero se meta a un incendio sin su uniforme de protección.
En el Perú, como si fuera poco, el índice de radiación ultravioleta sobrepasa habitualmente el nivel 12 y llega hasta el 14, y aún hasta el 15, lo que es terrible para la piel. Esta radiación no nos causará cáncer ahora, pero en pocos años es muy probable que sí. Por eso, los especialistas recomiendan aplicarse bloqueador solar media hora antes de exponerse al sol. Para las pieles muy blancas, niños y personas con manchas en la epidermis, los expertos sugieren protectores solares de factor 40 o superior, etiquetados como 50+.
Además, se debe reaplicar cada dos horas, o después de nadar o sudar bastante. Además, debemos tener claro que aplicarse jugo de papaya, de zanahoria o cualquier otra sustancia natural, no da la protección de un bloqueador.
Asimismo, ningún bloqueador nos protege al 100 por ciento de los rayos solares, y la diferencia entre un bloqueador de factor 50 y otro de 100 es mínima. También es una locura exponer al sol a los niños menores de un año, pues su piel es demasiado delicada.
Además, hay que usar sombrillas, anteojos con protección contra la radiación UV, sombreros de ala ancha y mangas largas para los brazos, sobre todo de color oscuro, que son los que mejor protegen.
Mucha gente no se aplica protector en las orejas y la parte posterior del cuello, lo que es un grave error, pues un alto número de lesiones en la piel se ubican en esas zonas. Es increíble que muchos hombres, por dárselas de machitos, se nieguen a usarlo. A vencer tontos prejuicios”. Gary tiene razón.
Me voy, cuídense.