Por: E. Cirilo
Hizo un juramento para respetar y salvar vidas, pero sus bajos instintos llevaron al médico Ángel Eduardo Valdivia Calderón (55) a ultrajar y asesinar a la joven Maryori Keiko B.V.(16), cuyo cadáver intentó desaparecer pagando 5 mil soles a un albañil, con quien lo enterró dentro de una casa, luego de trasladarlo hasta allí amarrado y dentro de una combi.
Con total tranquilidad, ante los agentes de la División de Homicidios de la Dirincri, el galeno adujo que ‘se le pasó la mano’ con la adolescente la mañana del 23 de abril, dentro de su consultorio de la calle Pedro Silva 572, en San Juan de Miraflores, cuando la operaba de una lipoescultura.
Por su parte, el general César Cortijo Arrieta, director de la Dirincri, afirmó que el protocolo de necropsia determinará la verdadera causa de muerte, pues el médico podría estar creando la coartada de la operación estética para aminorar su pena, aduciendo una negligencia médica.
Se supo que en el informe forense preliminar se indica como imprecisable la causa de muerte por el estado de putrefacción del cadáver.
Pero los agentes sospechan que el médico le suministró una sobredosis de anestesia o somnífero a la joven para tenerla indefensa y a su merced, para abusar de ella.
En otra parte de los interrogatorios, ante las evidencias recogidas por los detectives en su consultorio, el asesino habría terminado por aceptar que dopó, ultrajó y mató a la jovencita.
“Con la adolescente sin vida decidió desaparecer el cuerpo. Inmediatamente contactó al albañil Pedro Celso Sánchez (32), quien trabajaba en su casa de la avenida Ciro Alegría 270”, dijo un agente.
Agregó que por 5 mil soles el obrero se encargó de abrir la fosa donde ambos arrojaron el cuerpo, luego lo cubrieron con cal y arena y finalmente, el obrero, la tapó con tierra, una placa de concreto y mayólicas.
TRASLADO
Por otro lado, el general César Cortijo indicó que se busca a la enfermera que trabajaba con el doctor Ángel Valdivia, identificada como María Azañero Zambrano. “Ella fue despedida luego del sangriento hecho, investigamos si estuvo implicada”, dijo.
Pero, según la declaración que habría dado el criminal, lo más difícil fue el traslado del cadáver de su consultorio a la casa de Villa María del Triunfo. “Para ello habría usado la camioneta combi Volkswagen que guarda en su consultorio. Y esto se confirma porque las pruebas de Luminol en el carro dieron positivo para manchas de sangre”, dijo el perito.
Ayer, el médico rindió su ampliación de manifestación y hoy sería puesto a disposición de la Fiscalía.