El presidente de Bolivia, Evo Morales, protagonizó una ceremonia ancestral en las ruinas prehispánicas de Tiahuanaco, un día antes de prestar juramento en el Congreso para iniciar su tercer mandato consecutivo hasta el 2020.
Los rituales comenzaron temprano para Evo con una ‘limpieza’, y luego fue vestido por los amautas con un gorro y túnica, con figuras repujadas en oro. La vestimenta costó unos 4 mil dólares.
Estuvieron dos jefes de Estado y tres vicepresidentes, entre otros.
La vicepresidenta del Perú, Marisol Espinoza, asistió en representación de Ollanta Humala.
“Hoy es un día histórico, de reafirmación de nuestra identidad”, aseveró Morales.