El Ministerio de Salud (Minsa) recomendó que la lactancia materna en el recién nacido empiece con el consumo del calostro o primera leche, debido a su alto valor nutritivo y rico en propiedades antinfecciosas, lo que ayuda a mejorar sus sistema inmunológico.
Representantes del Minsa revelaron que este fluido espeso y amarillento contiene una elevada cantidad de anticuerpos, minerales, agua y proteínas, mayor al de la leche blanca, que se encarga de mantener saludable al bebé. Al calostro también se le considera como la primera inmunización (vacuna) para el niño porque lo protege contra diversas enfermedades, como los problemas respiratorios.
Otra de las características del calostro, en la lactancia materna, es su fácil digestión. No provoca cólicos estomacales y activa el sistema gastrointestinal del niño. El cuidado de esta parte del organismo es muy importante debido a la cantidad de material potencialmente dañino que lo atraviesa. La única alimentación requerida durante los primeros seis meses de vida es la leche materna.
Algunas madres equivocadamente asocian su coloración a la descomposición o suciedad y esperan a dar de lactar cuando se secreta la leche blanca. Un error porque inclusive su consumo desde el nacimiento previene la mortalidad neonatal, indicaron expertos del Minsa.
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