Papa Francisco recibió este jueves a varios artistas circenses en el Vaticano. El desfile de incluyó la aparición de un tigre al cual el Sumo Pontífice se atrevió a acariciar no sin algún susto de por medio.
El Papa Francisco tuvo en frente a siete mil de estos artistas en este evento con ocasión del Jubileo del mundo del espectáculo itinerante. Ahí dedicó unas palabras de elogio a la tradicional diversión que llevan a todas partes del mundo.
Así fueron pasando frente a él algunos representantes de estas escuelas hasta que uno de ellos llevó frente a él al felino que estuvo entretenido tomando leche de un biberón. El Papa Francisco fue invitado por el domador a acercarse y en un primer momento las caricias del Santo Padre alarmaron al tigre, lo cual a su vez lo hizo saltar por precaución.
Pero este simpático momento no hizo retroceder demasiado al Papa Francisco y terminó dándole algunas caricias más a este invitado especial a la Santa Sede.
El Papa Francisco no terminó esta audiencia sin asegurar a estos artistas que “la Iglesia se preocupa de los problemas que acompañan su vida itinerante y los quiere ayudar a eliminar los prejuicios que, a veces, los tienen un poco marginados”.
“Ustedes son artesanos de la fiesta, de la maravilla, de lo bello. Con estas cualidades enriquecen la sociedad de todo el mundo, alimentando sentimientos de esperanza y de confianza, con exhibiciones que tienen la capacidad de levantar el ánimo”, les dijo el Papa Francisco.
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