Ayer por la tarde el parlamento ruso aprobó definitivamente la ley que prohíbe la adopción de niños rusos a parejas homosexuales extranjeras y a personas solteras del mismo sexo.
El siguiente paso ante este rechazo por parte del Parlamento Ruso es que el presidente ruso, Vladimir Putin, firme dicha ley promulgada en defensa de la familia.
El presidente ruso está a favor de la tolerancia con estas personas de orientación sexual, pero en varias ocasiones ha aclarado que “el matrimonio entre personas del mismo sexo es contrario a la idea que tiene el Gobierno sobre “los valores tradicionales rusos”.