Sporting Cristal, el ‘copero’, el campeón, ganaba 2-0 a Guaraní sin problemas en su debut en el Grupo 8 de la Copa Libertadores. De pronto se acordó que es peruano y empató 2-2. Una más y van…
Con una presión interesante en la volante, pero con una defensa que es una puerta abierta con un letrero de ‘bienvenidos’, Cristal se adelantó con un cabezazo de César Pereyra (31’). La ‘Celeste’ mandaba ante un rival perdido que casi iguala a los 39’ a través de Federico Santander.
Irven Ávila tuvo el segundo a los 42’, pero el tanto llegó al inicio del segundo tiempo, cuando Josepmir Ballón aprovechó un error del defensa Cabral y definió mejor que cualquier ‘9’. Era el 2-0, la calma y el coqueteo con la goleada, pues los rimenses tuvieron hasta tres chances para liquidar el pleito.
Pero el fútbol peruano no suele completar la faena. Menos cuando tiene laterales sin marca como Edinson Chávez y Josué Estrada, quienes jamás frenaron a Eduardo Filippini y Tomás Bartomeus. Igual, una ‘ayudita’ es moneda corriente cuando juega un equipo nacional.
Por eso, a los 69’, Federico Santander remató con violencia, Penny –otro que no ofrece garantía– dio rebote y Fernando Fernández la empujó.
Desde ese momento fue otro partido y la visita retrocedió más. A los 84’, Bartomeus centró y Santander marcó de ‘palomita’ ante la marca de Estrada. Somos ingenuos. Por eso nos ven la cara.