¿Cómo calmar la rabieta de tu hijo? Descúbrelo aquí

No te desesperes y le consientas todos sus caprichos solo para que deje de llorar, respira profundo y sé paciente.

No consientas sus caprichos.

No consientas sus caprichos.

Las rabietas de los hijos están a la orden del día, pueden ocurrir en el momento que menos te lo esperas y causarte un dolor de cabeza. Para muchos padres puede resultar complicado controlar este comportamiento, por eso terminan complaciendo a sus retoños. ¡Grave error!

Si se les consiente todo luego de un berrinche, ellos entenderán que si lloran y gritan lograrán lo que quieren. Esta no es una buena pauta de crianza. A continuación te damos 5 pasos que te ayudarán a controlar esas terribles rabietas.

Respira profundo

Cuando empiece la rabieta respira profundo y pregúntale a tu hijo por qué está haciendo ese espectáculo. No lo jalonees ni grites, empeorarás las cosas.

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Dale una explicación

Agáchate y ponte a su nivel de estatura, cógele los hombros y dile por qué no puedes comprarle lo que quiere. Hazlo con cariño pero a la vez con firmeza. Si no entiende, déjalo que reniegue unos minutos.

Distrae su atención

Busca la manera de enfocar su atención en otras cosas, puedes decirle que más tarde irán a jugar al parque o que le prepararás esa comida que tanto le gusta. Eso sí, luego habla con él y explícale por qué no le diste gusto en aquello que pedía.

Levántalo con cuidado

Hay niños que aparte de llorar y gritar se tiran al suelo. Si te sucede eso, déjalo unos minutos así y después levántalo pero sin hablarle. Si le dices: ‘hijito, levántate’ o ‘te estás ensuciando’, tratará de manipularte. No permites que sienta que sus berrinches tienen poder sobre ti.

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Habla con tu hijo

Una vez que el llanto ha cesado y ya está tranquilo, abrázalo y con voz suave pregúntale si ya está mejor. En ese momento puedes aprovechar para conversar con él y decirle por qué no está bien su comportamiento.

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