Para muchos padres, los videojuegos están relacionados con la adicción y la violencia, razones por las cuales prefieren que sus hijos no se familiaricen con ese tipo de entretenimiento.
Sin embargo, hoy la diversión virtual es parte de la vida de muchos menores y según Luis Zapata, quien fue decano del Colegio de Psicólogos del Perú, es responsabilidad de los progenitores elegir aquellos videojuegos que son entretenidos y a la vez educativos. Estos deben:
1. Fomentar la agilidad mental. Existen juegos que exigen el uso de la memoria, la concentración, el razonamiento y la rapidez. “Para saber si cuenta con esas características, es necesario darse el tiempo para sentarse y conocer lo que muestra la computadora”, aconseja.
2. Impulsar al movimiento. Algunos videojuegos obligan a bailar o imitar los movimientos de ciertos deportes, como el tenis. Ideal para chicos con problemas de sedentarismo u obesidad.
3. Promover el interés por la cultura e historia. Debido a su calidad gráfica y sonora, hay juegos que enseñan al menor a identificar, por ejemplo, las banderas o las capitales de los países.
FIJAR HORARIOS
Una vez elegido el videojuego por su utilidad, se le debe establecer al menor un horario para que haga uso de él. Ese control evitará una posible adicción.
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