Kim Kardashian ha perdido casi 34 kilos desde que dio a luz a su hija North, pero su obsesión la ha llevado a estar pendiente diariamente de su alimentación y rutina.
Según la revista InTouch, la socialité quiere llegar a ser talla ‘0’, e incluso, ser más delgada que antes de quedar embarazada.
La revista señala que Kim no come carbohidratos, toma abundante líquido y se ejercita duramente tres horas en el gimnasio diariamente con el objetivo de lucir su vestido de novia hecho por un reconocido diseñador y con el que podría salir en portada de la revista ‘Vogue’.
“Ella cuenta las calorías de todo y vive comiendo pescado a la parrilla, pollo y verduras al vapor. No consume ningún carbohidrato desde hace cuatro meses”, contó el amigo personal de Kardashian, Jonathan Cheban.