‘Yo también me llamo Perú’ y ‘Cuando llora mi guitarra’ fueron entonados, mientras el ataúd era colocado en su último paradero. Así, el emblemático hincha del Atlético Chalaco regresó al barrio y fue enterrado junto a su padre, su madre, sus hermanos y su abuelo. Foto: David Vexelman/Perú 21