'Pánfila': Mujer de buena madera

La actriz María Victoria Santana se apoyó en su talento para avanzar y convertirse en una de las mejores imitadoras del país.

Redaccion Trome

Por: F. ‘Vocha’ Dávila

Los sueños más hermosos surgen en los momentos de mayores angustias. La necesidad nos hace creativos. En el humilde barrio de ‘Los Cubanos’, de Villa El Salvador, una chica bellísima, honesta y sincera, cultiva sus esperanzas y, de a poco, sin deberle nada a nadie y siempre en el camino correcto, va haciendo realidad todo lo que fue construyendo en su imaginación.

María Victoria Santana, hija de un cubano que llegó escapando del régimen de Fidel Castro, ahora es una actriz cómica de ‘Risas de América’. Esta mujer, de figura escultural, representa muchos personajes, pero es con la ‘Pánfila’ que se ha instalado en el corazón de la gente.

Hay jovencitas con menos talento que tú, que tienen carro y viven en zonas exclusivas de Lima, debido a otras cosas...

Cuando me despierto y miro mi refrigeradora y mi lavadora, me siento bien, las he comprado sin meterme en nada indebido.

Pero imagino que has tenido propuestas indecentes.

Siempre hay. El dueño de un casino, donde presenté mi show, me ofreció llevar a mi papá a Cuba y obviamente quería salir conmigo.

¿Y qué respondiste?

Nada, porque decir cualquier cosa es dejar abierta la posibilidad. No hice caso y yo, con mi dinero, lo he podido mandar a que vuelva a ver su tierra y su familia.

Se nota que vas avanzando a paso firme.

Ya he podido comprarme un auto de segunda para movilizarme. Vamos avanzando en la construcción de la casa.

Este presente es auspicioso, seguro la niñez fue muy dura.

A veces no había para comer y tomábamos agua con azúcar para engañar al estómago. Frejol con arroz y cuando había dinerito, mi mamá freía jurel y no me agradaba. Por eso decía: No me gusta el pescado, pero cambié…

¿Por qué?

Es que mi enamorado tiene un restaurante y me ‘presentó’ al lenguado, chita y toda esa variedad, ahora digo que sí me gusta ja, ja, ja.

Esta zona es ‘picante’, ¿nunca te ‘cruzaste’ con las drogas?

Para nada, además siempre integré el grupo de la iglesia. Estuve alejado de todo ello.

Dicen que en la televisión no se encuentran amigos.

No tengo amigas allí, solo compañeras de trabajo. Desde que me inicié, siempre he sufrido ataques, me han robado cosas, ya aprendí y hago mi vida sin molestar a nadie.

Te dieron con todo, Leysi Suárez y Grace Becerra dijeron que eres fea y el país entero se preguntó, ¿qué les pasa a estas envidiosas?

Ja, ja, ja. No me importa lo que me digan, porque cuando me levanto y me veo al espejo, sé que no lo soy. Porque mis pestañas siguen allí, mis ojos y no hay nada artificial. Soy tal cual.

Entrando a tu trabajo, los grandes imitadores afirman que el baño es el lugar perfecto para ensayar voces, porque tiene acústica ese lugar.

No lo puedo asegurar, porque el mío no es de concreto. La casa es de madera.

Algunas chicas, en tu condición, mirarían a un galán de ‘billetera gruesa’.

Seguro lo hacen las que no les gusta el trabajo y no tienen alguna profesión.

¿Pero compartes el dicho: Billetera mata galán?

Hummm, tengo otro: ‘Floro mata billetera’. Si vieras cuantas chicas se dejaron engañar y ahora están embarazadas y sin el padre de sus hijos al lado.

Otra de los filósofos de la calle: ‘Habiendo tantas mujeres, no te vas a meter con la ex de tu causa’. Cambiándolo para tu sexo, ¿qué opinas?

Jamás estaría con el exenamorado de una amiga, qué feo. Sería como pedirle que me preste un calzón que ya usó.

Si ves a la pareja de tu ‘amigaza’ afanando a otra chica, ¿la llamas y le avisas o te haces la que no viste nada?

Le aviso, porque si me pasa a mí, me gustaría que también me lo adviertan.

¿Aceptas que tu chico tenga una confidente?

No creo. Pero en mi caso estoy tranquila, él es ‘Salvavidas’ y sus amigas son señoras, ja, ja, ja.

Me parece que eres de las que quieren saber cuánto gana el varón.

Yo manejo sus tarjetas de crédito y me las da, porque él asegura que las ‘revienta’.

¿Y la utilizas?

A veces para comprarme algo y después repongo el dinero.

¿‘Mano abierta’?

Era, pero presté a tanta gente dinero y no me devolvieron, por eso dije nunca más.

No te veo un Iphone, Galaxy o esos telefonazos que lucen las artistas y chicas de tu edad.

Utilizo uno normal. No soy de estar conectada con el enamorado y saber qué hace todo el día o dónde andamos. Cuando quiero entrar al Facebook, llego a mi casa y lo reviso. Para qué más.

¿Y le has dado la clave de tu Facebook a tu novio?

No, pero sí tengo la suya, porque a veces me llama y me dice ‘chequea si me mandaron tal mensaje o un correo’. No lo hacemos como un acto de confianza, sino por necesidad.

¿Celosa?

Cuando pierdo la confianza en alguien, digo hasta aquí nomás. Para qué hacerte daño pensando si esa persona te es infiel o está con otra. No hay nada como vivir en paz.

O sea que nada de perdonar infidelidades…

Nunca.

Milagros Moy, la voleibolista, nos aseguró que los peruanos son mañosos para los piropos.

A mí me ha pasado de todo. Una vez un chico tiró su polo para que lo pise y otra vez un muchacho iba de la mano con su enamorada y dijo: ‘esto es una mujer, no esta m… que llevo a mi lado’. Ambos se mataron de la risa.

La televisión está llena de ‘figuretis’.

Conozco a muchos que llegan a las grabaciones y salen varias veces para que la gente les pida autógrafos. Eso no me gusta. Si los fanáticos te regalan cariño, bienvenido, no hay que andar buscándolo.

A propósito, jamás he visto que te niegues a una foto.

Es que yo sé muy bien que por la gente estoy donde estoy. Por ellos me contratan y puedo ir levantando mi casa. Eso no lo olvido.

Aparte de tus proyectos, ¿hay un sueño escondido?

Quiero hacer algo por mi distrito, no sé si como regidora o alcaldesa. Acá puedes entrar en la historia ayudando a la gente, porque hay mucha necesidad.

Creo que hoy conocimos una bellísima mujer y una chica de gran cerebro.

Gracias a Trome por esta entrevista y cuando quieran. Me divertí mucho con las preguntas y la pasé bien.

Lo dicho, emboba su belleza, atrapa su cerebro.