Renzo Schuller y Gian Piero Díaz cuentan que su amistad empezó hace 13 años y que el humor los mantiene unidos. Hoy son conductores de Reto de Campeones y también padres, experiencia que les ‘cambió la vida’. Lejos de las luces y reflectores, hablan de su nueva experiencia televisiva y de las ganas que le ponen para sacar adelante el reality latino.

¿Qué tal sus experiencias como padres?
Gian Piero: Mis hijos me cambiaron la vida, es maravilloso tenerlos y compartir tiempo con ellos. Mi hija menor es una preciosura y disfruto mucho con ellos.
Renzo: Bueno, yo tengo una hija y, de hecho, que me cambió la vida. Tener familia, pasarla juntos, no tiene precio.

Se dan tiempo para compartir…
G: Claro, aunque ahora duermo poco.
R: También me pasa lo mismo porque estoy buscando el segundo ja, ja, ja. Espero que este año quedemos embarazados para tener la parejita, estoy chambeando en eso…
G: Pero hay que darse tiempo, por ahora he rechazado otros trabajos por mi hija, pues quiero estar con ella.
R: Yo estoy en el teatro y tengo poco tiempo, pero mi espacio libre es para ella. Así sean 10 minutos, me pongo a saltar en la cama con ella. Los momentos son inolvidables.

Ustedes tienen una larga amistad…
R: Nos conocemos desde el 97 por ‘Torbellino’, pero nos hicimos amigos en el 2003, en ‘Estos chicos de ahora’.
G: En esa época éramos chibolos y yo paraba más con su hermano Mauricio. Ya en el 2003 nos hicimos patas, estamos 13 años juntos y tenemos tres hijos, ja, ja, ja.
R: La gente piensa que vivimos juntos, hay esa percepción y no es así… yo duermo en el cuarto y él en la sala.

Pero se soportan…
G: Si estuviéramos todo el día juntos, no tendríamos tan buena relación. Nos juntamos cuando podemos, pero primero hay una relación laboral.
R: Juntos las 24 horas nos sacaríamos los ojos, pero chambeamos juntos y después, cada uno se va a su casa. Tenemos prohibido llamarnos por la noche, ja, ja, ja…
G: Nuestra relación de amigos es también laboral.
R: Cuando voy a mi casa, mi mujer me pregunta por él y cómo está, y no sé qué decirle, porque en el día hemos hablado de trabajo.

El humor los une mucho, son cómplices…
R: Somos graciosos, nos jodemos… la palomillada sale cuando nos juntamos.
G: Siempre nos tomamos las cosas en serio, y hasta a lo negativo le sacamos el lado positivo con una broma.
R: Y el humor nos ha servido para minimizar algunas cosas, darles la vuelta. Además, nos leemos al mirarnos, sabemos cuándo callar, hay complicidad.

Los años, la experiencia siempre ayudan a manejar situaciones…
R: Claro…
G: Siento que somos igual de idiotas que antes. La seriedad te quita el encanto, pero sí manejamos mejor las situaciones.

Esa madurez los llevó a buscar un cambio con ‘Reto de campeones’…
G: Apostamos por un formato distinto, fue una decisión nuestra.
R: Es madurar, hacer un cambio. Lamentablemente muchos chicos exponen muchas cosas, llegaban donde nosotros y teníamos que darle la vuelta y ya no queríamos eso.
G: Hoy, tenemos la oportunidad de producir contenidos para sentirnos cómodos. Por eso, si alguien se porta mal, se va a la calle…
R: Claro. Porque muchos creen que portarse mal afuera era la forma de hacer las cosas… Muchos chicos de reality simplemente quieren vacilarse y sacar plata… yo les daba mi ejemplo, les decía que empecé siendo actor y cuidaba mi carrera.

¿Y los entendían?
G: Algunos no entendían…
R: No sabes la cantidad de veces que les hablamos, pero eran un saco roto, andaban desubicados.
G: Sucede que se marean rápido por un tema de la edad, pues pasan de tener la propina de papá o de trabajar ‘part time’, y de un momento a otro ganan más que el papá. Se marean y está bien que te marees, pero hay que volver al camino.

¿Les incomoda no tener las altas cifras de rating que tenían en ‘Combate’?
R: Estamos en un horario complicado y lo queríamos así, es un reto. Hace años hicimos eso en ‘Combate’ y sabemos que nos va a costar. Sin embargo, está bien para el horario, pero queremos más.
G: Ya logramos establecer la idea que es un programa diferente, que se puede hacer algo bueno.

Entonces, se sienten tranquilos…
R: Totalmente, y que le vaya bien a todo el mundo.
G: Nunca miramos sobre el hombro, valoramos al que está abajo porque comenzamos ahí. Cuando empezó ‘Combate’ hacíamos 4 puntos.

¿Qué tal trabajar con Natalia Málaga?
R: Es muy divertida, un ‘mate’ de risa. La gente la verá mal humorada, pero fuera cámaras es pura risa.
G: Es una mujer linda, como persona es un pan de Dios, es amorosa.

¿Es muy recta?
G: Su labor es formativa y no puede ponerse al nivel de los chicos para mantener una postura ante ellos.
R: Estamos contentos con ella, por todo lo que significa, las alegrías que nos ha dado.
G: Claro. Además, la veíamos en shorcito. Recuerdo que ponían el televisor en los colegios cuando jugaba en Seúl 88 y me levantaba tempranito…

¿Qué edad tenías?
G: Doce años, veía el primer set y me iba, ja, ja, ja… En esos tiempos no había ayuda memoria, era foto mental.
R: Y le hemos dicho: no sabes cuántos ‘mates’ me he metido contigo.
G: Ha sido en tu nombre y una que otra por Denisse Fajardo.
R: Empezaba con Natalia y terminaba con Gaby, ja, ja, ja…
G: Con Natalia nos llevamos bien, es ‘paja’ trabajar con ella.

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