Una sonrisa, una frase, un gesto, una carcajada. La señora del rostro bonito, talla impresionante, sigue como siempre. Amable, sin poses, pero ahora mucho más tierna. Karla Tarazona ; tres hijos (Stephano, Alessandro y el recién nacido Valentino) le han dado una imagen maternal que la hace más sensible en cada respuesta. Son las 11 de la mañana en Chorrillos, el mar genera un airecito fresco que se mete por la ventana de la casa de Karla Tarazona, la artista de la pista de baile de ‘El gran show’. Hay movimiento, porque la llegada de un nuevo bebé provoca atención y afecto especial. Acá, en su hábitat, donde vive con Christian Domínguez, recibirá un Día de la Madre singular.

Karla, le pregunto a la mujer, ¿perdonarías una infidelidad?
Eso no se perdona. Pero te puedo decir que no siempre es verdad lo que se escucha o se ve.

¿Tampoco aguantarías mentiras?
No las soporto.

Te confieso que más de una señora me comenta: “Seguro aguanta que Christian haya sacado los ‘pies del plato’ con Vania por cuidar su hogar”.
Trabajo, y no me callo por ser mantenida.

¿Cuándo va a salir a la luz la historia?
Pronto. He aprendido a tener paciencia.

¿Y odias a la Bludau?
Hay gente que me hizo mucho daño y nunca la odié.

Pero algo debes sentir…
Todo da vueltas.

¿Lloraste?
Sí. Me quiebro cuando hay cosas que afectan a mi familia.

¿Le dijiste al ‘Wachimán’ que pida que donde lo contraten no vaya la bailarina?
Jamás haríamos eso. Si mi esposo tiene ese poder, que me consiga un programa en la televisión.

¿Tus hijos no sufren la inmediatez de ustedes en el colegio?
No, porque no ven nada de programas de espectáculos, ni siquiera cuando salgo yo. Los blindo de todo lo que sea farándula.

¿Y cómo se enteraron los mayores que venía un nuevo hermanito?
Vivimos con ellos y todo se dio de manera natural. El mayor tiene 6 años, cuida a su hermanito y pide que tenga otro.

¿Eres buena madre?
He aprendido a serlo. Soy muy protectora. El mayor me cuenta que ya tiene novia y se llama Emma y pienso con quién se irá cuando crezca.

¿Te asusta?
Sí. Dependiendo de qué rubro sea la chica, la ‘googleo’, ja, ja, ja.

¿Es broma?
Falta mucho, pero realmente sí me preocupa.

Un día leerán o escucharán tu célebre frase: ‘Yo cobro, tú no’.
Ya la borraron del Internet.

¿Si alguno la archivó?
No importa, ellos también cometerán sus errores. Pobrecitos, van a cargar una gran responsabilidad.

Tus niños le dicen papá a Christian y a Leonard. ¿Cómo lo explicas?
Al mayor le hemos dicho que tiene mucha suerte de tener dos papás y por eso dice que es Kung Fu Panda.

Otras mujeres optan porque los llamen tío.
No les he engañado ni prohibido de nada.

O sea, sus corazoncitos están divididos entre dos amores.
Sienten más a Christian, porque comparten más a su lado.

¿Les has revelado que Leonard hizo esto o lo otro?
No he confundido mis discrepancias con su padre.

¿Ya pasa la manutención?
Cumple a mitad en el tema económico y, cuando quiere verlos, se le permite.

¿Se comunican?
Solo cuando salen le explico cómo es la crianza y así no se le da otro trato.

A propósito sobre él, ¿nunca le fuiste infiel?
Seré loca, me voy de lengua, pero no llego a eso.

Tu pareja tiene una hija, ¿conoce a tus tres varoncitos?
Camila viene a la casa, compartimos y hablamos para que se traten como hermanos.

¿Estaba en los planes Valentino?
Me estafaron. Christian me advirtió: “Tengo sangre chancletera” y yo tranquila. Por fin una niña en casa… y salió hombre.

¿Vas a buscarla?
En tres años, antes no.

Son cuatro meses de nacido del último heredero, ¿estás en plena ‘chambaza’?
Ya estoy canchera.

¿El papá apoya?
Cuando nació, se levantaba en la madrugaba conmigo, lo atendía mientras preparaba la leche. Compartió esos desvelos.

¿Les das sus ‘tastás’ a los chicos?
Me da mucha pena, pero a veces es para corregirlos, será bueno para su vida.

¿Contigo fueron así?
Mi mamá me dio mis buenos correazos, gracias a eso no fui drogadicta ni mamá a los 15 años.

¿A qué edad tu viejita habló de sexo contigo?
Nunca lo hizo.

¿De drogas?
Era un tabú. Recuerdo que una vez quise probar marihuana, pero no supe cómo se fumaba y por eso no sentí nada y no me llamó la atención.

¿Sacaste ‘canas verdes’ a tu progenitora?
Fui tranquila hasta los 18, de allí cambié. De chibolita fui hombrecito, marimachito, ja, ja, ja.

Tienes formación cristiana, ¿igual crías a los pequeños?
No voy a la iglesia, pero mi madre es Testigo de Jehová y eso les inculco a ellos.

Una versículo recurrente es Juan 8:44: ‘El que miente es hijo del diablo’.
No les comento eso, porque no los quiero satanizar. Pero ya saben que deben contarnos sus errores. Cuando los veo venir con carita de haber hecho un ‘autogol’, ya sé que desean decirme lo que pasó.

¿Oras?
Sí y donde esté, porque su palabra dice que Él está hasta debajo de las piedras.

Una consulta: ¿celosa?
No.

¿Ves las novelas donde actúa?
No.

Si eres celosa.
La única autorizada para chaparlo es María Grazzia Gamarra porque vienen haciendo serie juntos.

¿Te daría bronca verlo en escenas amorosas?
Solo tengo que morderme la lengua. Lo bueno es que también es una contribución a la casa ja, ja, ja.

Es grato volver a entrevistarte después de mucho tiempo, verte feliz y eso me hace enviarte un saludo de los lectores de Trome. Sé que el trabajo de ustedes es publicar las noticias, pero a veces digo: Si sacaron tantos titulares, sería bueno que cuando la verdad aparezca, pongan uno reconociendo que se equivocaron conmigo.

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