Kina para todo el mundo

Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó por sus tallarines al pesto con harto queso parmesano y su bisteca la inglesa. Además, una jarra de emoliente calientito.

“María, qué emoción sentí al ver nuevamente a Kina Malpartida salir airosa en el ring, levantar los brazos y, al final, pronunciar la frase: ‘Para ti, Perú’. Porque aparte de sus condiciones deportivas, su garra, la fuerza de sus puños, su habilidad para esquivar los golpes y la resistencia de sus piernas, está su amor por el país.

Ella está orgullosa de su tierra, pese a haber vivido parte de su vida en Australia. Kina Malpartida Dyson nació el 25 de marzo de 1980. Es hija de Óscar ‘Chino’ Malpartida, ex campeón peruano de surf y de Susy Dyson, una top model de los años 60, que fue actriz en Francia y en el Perú adornaba las páginas
de revistas como ‘Caretas’.

Desde los 6 años, Kina practicó karate y fue ‘cinturón marrón’ a los 13. Ese mismo año incursionó en el surf y fue campeona en algunos torneos de las categorías infantiles, coronándose campeona nacional en 1996. Estudió en el
colegio ‘Roosevelt’ de La Molina y en 1999 se mudó a Queensland, Australia. “Sé cocinar de todo y lo que mejor me sale es el lomito saltado”, dijo un día Kina. Es que, en el país de los canguros, estudió Administración de Restaurantes y Catering en Griffith University, donde obtuvo su bachillerato.

Fue en el año 2003 cuando, venciendo todos los prejuicios, Kina decide practicar el deporte de las ‘narices chatas’. Acompañó a un amigo a un entrenamiento y el box le encantó. Su primera victoria como profesional fue contra la australiana Katrina Hartding.

Tras ganar sus primeras cinco peleas, dejó Australia y viajó a Estados Unidos para seguir su carrera en Los Ángeles, donde actualmente reside. Obtuvo el título de la Asociación Mundial de Boxeo, en la categoría Superpluma, el 21 de febrero del 2009, en el mismísimo ‘Madison Square Garden’, tras vencer por nocaut técnico a la estadounidense Maureen Shea, quien cayó a la lona en el décimo round.

La del sábado fue su quinta defensa del título, esta vez ante una filipina. Ya lo había hecho ante una brasileña, una británica y una colombiana. Kina brilla, ha logrado los Laureles Deportivos en nuestro país y los peruanos se rinden a sus pies, pero ella sigue con la misma humildad.

Parafraseando al recordado Augusto Ferrando, podríamos decir ‘Kina para todo el mundo’”. Esa chica es un ejemplo. Me voy, cuídense.