Cuando Carolina Ortega (36) tomó un taxi y jamás se hubiera imaginado que el chofer del vehículo era nada menos que su propio padre, a quien no veía hace 30 años, en Buenos Aires, Argentina.
La joven, que es asesora de un diputado argentino, contó su increíble y contó la historia en la red social Twitter.
“Lo vuelvo a mirar, no puedo creerlo.Hace 30 años q nos vimos x última vez.Leo el cartel con los datos q cuelga del asiento delantero. Es él”, escribió Carolina.
“Él se dio cuenta porque me trajo a la casa que dejó hace 30 años, lo vi en sus ojos por el espejo retrovisor. Mis ojos, somos muy parecidos”, agregó.