Nguyen Thi Phuong es el nombre de la mujer que a los pocos días de comer mariscos envejeció 50 años aproximadamente.
La historia se inició en el 2008 y desde entonces los médicos no logran dar con la solución a este caso que ha dado mucho qué hablar a la ciencia.
“*La piel de mi cara, pecho y vientre se pliega como la de una anciana*. Yo nunca he tenido un hijo”, señaló la mujer.