Un informe del programa ‘Reporte semanal’ dio a conocer que ya está en Perú la secta religiosa ‘Creciendo en Gracia’, que obliga a sus creyentes, incluidos niños, a tatuarse el ‘666’ y la triple ‘S’ (Seamos Siempre Salvos) en los brazos.
La congregación fue fundada por José Luis de Jesús Miranda, un adicto a las drogas (fallecido el 2013), que se autoproclamaba Jesucristo resucitado y también Anticristo. La secta opera en Lima, Trujillo y Tacna.