Murcia, España.- Pobre cerebro, piensa una y otra vez, y lo peor es que la solución no está en sus manos. Estas horas son duras para Guillermo Sanguinetti, técnico de Alianza Lima, quien trabaja con sus muchachos, pero no puede definir su once ni sus variantes. Tres de sus flamantes refuerzos tienen en duda su continuidad en el club.
Tome atención: El zaguero Diego Minaya, quien dio positivo en un control antidoping en la Sudamericana, cuando jugaba por el Juan Aurich ante el Itagüí de Colombia, sería suspendido dos años y en Matute la administración temporal habría decidido rescindirle el contrato.
Lo de Víctor Cedrón tampoco se define. Firmó teniendo un año más de contrato con la Universidad César Vallejo, que ha presentado su reclamo a la Cámara de Conciliación y Resolución de Disputas y van a dar pelea por el jugador. El mismo problema pasa con Mauricio Montes, quien todavía tenía una temporada más de vínculo con Real Garcilaso, que pide sanción por incumplimiento de contrato.