Por: Mariela Celis
Las vacaciones escolares son semanas de mucho relajo y distracción para un hijo, pero también una excelente época para que empiece a desarrollar nuevas habilidades. No está bien que pase todo el día frente al televisor o la computadora, mucho menos ahora que existen diversos cursos muy interesantes. Uno de ellos es el taller de iniciación musical que dicta el Conservatorio Nacional de Música.
Si su niño tiene entre 5 y 6 años, acaba de aprender a escribir, sumar y restar de forma básica, por tanto necesita reforzar nuevas competencias. La música por el don que posee le proporciona un desarrollo a nivel psicomotor, intelectual, emocional y social. “Pocas actividades integran estos dominios. Además, un chico que recibe un aprestamiento musical temprano, aprende a hablar y expresarse mejor, pues la comunicación verbal no solo es articulación, sino entonación”, manifiesta el maestro Fernando De Lucchi, director del Conservatorio Nacional de Música.
La etapa de alfabetización se ve estimulada y el aprendizaje de matemáticas también mejora. “En la música cada sonido es una cantidad de vibraciones por segundo, se trabaja con el tiempo y los números sin notarlo”, indica.
CONCENTRACIÓN Y COMUNICACIÓN
De Lucchi señala que un niño en contacto con la música refuerza su capacidad de concentración y siente la necesidad de integrarse con los demás. “Establece una comunicación armoniosa y trabaja en un mismo objetivo con otros chicos”, remarca.