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Asu Mare

Ella es así, sin medias tintas, sin esa palabrita elegida para quedar bien. No es la mamá de ‘Cachín’, pero se le parece harto. Una mujer de ayer que vive muy bien hoy. La señora Ana Cecilia Natteri ha traído dos hijos al mundo, es única, también divertida, pero cuidado, es una ‘fierecilla’ y se la vamos a mostrar. Sé que al final dirán: ‘Asu mare, qué brava esta señora’.

Hoy, en el día de la mamita, ¿cuál sería un buen regalo?

Como en el comercial, nada de artefactos eléctricos. Hace muchos años, un hermano mío trajo todo un juego completo para la cocina y se la entregó a mi mamá.

¿Y cómo reaccionó?

Le dijo: ‘Esto es para la casa, no para mí’ y se lo devolvió.

¿Tú que prefieres en esta fecha especial?

Una florcita sería lindo, un desayuno en la cama, como lo hizo mi esposo para mi cumpleaños.

¿Almorzar en la calle?

No. Todo está lleno, te atienden mal y terminas de mal humor.

¿Eres tan dura y recta como la señora ‘Chabela’, la viejita de ‘Cachín’ en la película.

No hablo lisuras, no es mi estilo.

¿Seguro le dabas permiso a tus ‘cachorros’ para que salgan con sus amigos?

Si no dejaban las cosas ordenadas en su cuarto, no salían.

¿La hora límite?

La adecuada, pero con el celular era fácil ubicarlos. El problema es que a veces se acaba la batería o lo apagan.

¿Si tu hijo trae una chica y no te simpatiza?*

Mi problema es que mi cara me delata. Si no me gusta, ellos saben lo que estoy pensando. Tampoco llego a actuar como mi mamá.

¿Se pasaba de la raya?

Tuve un galán y no estaba de acuerdo que me busque. Cuando me visitaba, salía y lo trataba mal: ‘No está’ y sin dejarlo responder tiraba la puerta. El tiempo le dio la razón, porque no me convenía.

¿Cómo te llevas con el yerno?

Es una buena persona, buen padre, trabajador. Eso es lo que uno busca para su hija. Después, si es feo o bonito, no sabe comer, son problemas que debe resolver ella como esposa.

Creo que no soportas que hablen tanto por celular.

Es que no entiendo a esta generación, ver 5 personas en un restaurante y todas con sus celulares y sin conversar, es increíble.

¿Exiges que en tu mesa nadie saque el aparatito?

Trato que no hagan eso. Mi nieta más pequeña llega y se mete a la máquina.

Te pregunta: ¿Tienes Wifi?

Sí.

¿Se lo prohibes?

Trato, pero no exijo, es que corro el riesgo que no vengan a verme porque no respeto sus costumbres.

¿Te metes en las relaciones de tus hijos?

A estas alturas de mi vida que resuelvan sus cosas. Solo si me piden una opinión me meto.

Más arriba me contabas: ‘No hablo lisuras’. Sorprende, porque hoy es casi normal.

Las chicas se comunican hablando 10 palabras y 8 son tremendas lisuras y el lenguaje lo malogran porque lo escriben abreviando.

Las ‘redes sociales’ son una locura. Vi una mujer nebulizando a su pequeña y publicó las fotos en su Facebook.

Si tengo un familiar en ese estado, estaría preocupada porque respire de manera normal y no en tomarle una foto y colgarla en mi muro para que mis amistades pongan me gusta.

¿Hablas bastante por el ‘fono’ fijo de tu casa?

Me encanta. También creo en la conversación mirándose a los ojos, los gestos que hace la otra persona cuando le dices o cuentas algo. Las redes son para las emergencias o si quieres promocionar una obra de teatro o evento.

Te hiciste artista en la dictadura militar, ¿fuiste de izquierda?

A los 18 era de izquierda, salía a las marchas, los policías me han correteado en las protestas, mediante las obras expresábamos nuestra posición y reclamábamos libertad.

¿Qué te hace renegar?

La falta de respeto o invadir el terreno del otro. Me molestaría que mi esposo llegue, agarre el control del televisor y cambie de canal para ver la ‘Champions’, pero él no es futbolero, menos mal.

¿Y tú?

Soy de la ‘U’. Después que la selección perdió tanto, me alejé del balompié.

¿Disfrutaste al mejor Roberto Chale y Teófilo Cubillas?

Iban a los Mundiales.

Los consideraban los más pintones.

Tenían su atractivo, también ganaban y eso los llenaba de atributos.

Justamente, el gran Julio César Uribe me aseguró: ‘Hoy los chicos se conocen en la discoteca y terminan esa misma noche en la cama’.

Es atroz, me dan pena esas chicas, eso es no quererse.

Otras se graban en la intimidad.

No sé cuál es el placer y no entiendo por qué no lo borran.

Otro tema es que se ‘engañan’ y reconcilian con facilidad. ¿Perdonaste una infidelidad?

Nunca. No he conocido ni he sabido que me lo hayan hecho, pero no lo pasaría por alto porque es una falta respeto, una deslealtad.

¿Cuántos años de casada?

Ya van 37 y nunca me separé.

¿Todavía caminas de la mano con tu esposo?

Sí, es mucho más alto que yo y por seguridad, lo tomo del brazo, ja, ja, ja.

¿Pero por un acto de amor?

Cuando vemos alguna película.

Dice Carla García, la hija de Alan, que si un hombre después de 30 años de casado despierta junto a su señora y le dice: ¡Qué linda que estás!, miente, porque envejecemos y ya no están como cuando recién se conocieron.

Todos tenemos patrones de belleza diferentes. Tú despiertas y está la compañera o compañero de toda tu vida, con quien tuviste hijos, efectivamente la sigues viendo guapa. Si fuera como ella dice, los matrimonios no pasarían de los 5 años.

Volviendo a tus años mozos, esa época de los ‘hippies’ y que los jóvenes fumaban marihuana como una manera de protesta. ¿Probaste alguna vez?

En una sola oportunidad, no me gustó y nunca más.

Aquellos tiempos también explotó el twist, ese baile que se movían los hombros, las caderas y los pies no se despegaban del suelo.

Por supuesto. Usaba mis superminifaldas y los pantaloncitos calientes.

Dios, con esas prendas te ‘llenaban’ de piropos.

Cierto, esa es la palabra: piropos. Ahora son agresiones.

¿Los artistas también se amanecían en las peñas?

He sido seguidora de Chabuca Granda y Eloisa Angulo. Me he quedado algunas veces hasta las 2 de la madrugada. Es que normalmente la gente joven pierde la brújula de la hora, ja, ja, ja.

O sea una gran bailarina.

Fui, mi esposo no baila y por él ya me olvidé.

¿Explicación para entender a una ‘trampa’?

No niego que alguien te puede atraer, pero si sientes que podría poner en peligro tu matrimonio, lo cortas. Eso es la lealtad.

Sabes, las familias constituidas tienen una mamá como la de ‘Asu mare’ y como tú.

Soy directa y franca. He tratado de criar a mis hijos sin lisuras ni golpes, porque le creas un rencor innecesario. Con los hijos grandes ya no puedes hacer nada. Solo encomendarlos a Dios y a tu santo de mayor devoción.

Entonces, a nombre de Trome, que surjan más madres de tu estilo.

Nunca he hablado así, siempre fui perfil bajo. Edítalo bonito, ah. Un beso enorme a tus lectores.

_Hoy, ella se luce en ‘Fausto’ de Goethe en el teatro ‘La Plaza’ de Larcomar, de jueves a martes, a las 8 de la noche y domingo a las 7 p.m. Es rápida, creo hiperactiva, se preocupa del medio ambiente y cuida los árboles de su parque.
Siento, me provoca citar muchos poetas, narradores o filósofos para resumir a esta dama en este día especial, recurro a Honoré de Balzac, novelista francés: “El corazón de una madre es un abismo profundo, en cuyo fondo siempre encontrarás perdón”._